• MC-F-003. Tema 1.3. Las fluctuaciones de la economía europea durante el siglo XX.
Distrito financiero de «La Defense» (París).
Fotografía: Petit homme. Licencia: CC Atribución 2.5.
Al ordenar las tasas de crecimiento de los PIB per cápita se observa que ha habido dos historias distintas:
-
Por una parte, los países occidentales que han crecido tanto más cuanto más pobres eran al comenzar el siglo.
- Por la otra, los orientales, que han crecido poco aunque fueran pobres.
En los primeros países en la clasificación de tasas de crecimiento seculares corresponden a casos de rentas per cápita bajas o medio-bajas. Entre los occidentales, el Reino Unido ocupa el lugar que le corresponde: era el más rico en 1913 y es el que menos ha crecido a lo largo del siglo. Es muy interesante observar que los otros países occidentales que imitaron precozmente la industrialización británica (Bélgica) o que ya eran muy ricos (Holanda), o que se adaptaron rápidamente a la industrialización (Suiza, Alemania, Austria y Francia), están situados por encima de Gran Bretaña pero netamente por debajo de los países que estaban en la periferia menos industrializada de la Europa occidental. Estos están en la parte alta de la clasificación. Son los países escandinavos, que han crecido mucho en el siglo XX, y la periferia occidental y meridional: Irlanda, Portugal, Grecia, Italia y España. En cambio, todos los países de la Europa centro oriental y oriental, cierran la clasificación y ponen de manifiesto un fracaso en su convergencia sobre los niveles de bienestar de los más ricos.
País |
Tasa de crecimiento |
País |
Tasa de crecimiento |
Portugal |
2,79 |
Suiza |
1,91 |
Noruega |
2,68 |
Alemania |
1,88 |
Dinamarca |
2,60 |
Bélgica |
1,81 |
Finlandia |
2,58 |
Chequia |
1,68 |
Grecia |
2,33 |
Ex Yugoslavia |
1,68 |
Italia |
2,30 |
Polonia |
1,64 |
Irlanda |
2,20 |
Reino Unido |
1,58 |
España |
2,19 |
Eslovaquia |
1,55 |
Suecia |
2,14 |
Hungría |
1,33 |
Francia |
2,05 |
Ex URSS |
1,14 |
Austria |
2,02 |
Bulgaria |
1,13 |
Holanda |
1,91 |
Rumania |
1,03 |
Tasas de crecimiento del PIB per cápita, 1913-1998 (en porcentaje).
Los cambios de fronteras acarreados por las dos grandes guerras, la interrupción de la recolección de estadísticas en los momentos de máxima desorganización bélica, posbélica o revolucionaria, la difícil compatibilidad de las contabilidades nacionales de los países regidos por sistemas económicos distintos, todo ello dificulta enormemente la labor de sumar la actividad económica europea en su conjunto a lo largo del siglo.
El índice del PIB total nos permite una primera aproximación a las etapas de la economía europea occidental, y las tasas de crecimiento interanuales, facilitan un mejor seguimiento de la coyuntura:
-
El estallido de la primera guerra mundial provoca una reducción del PIB. La caída más fuerte se producirá con la etapa final de la guerra, en 1918, y con la desorganización subsiguiente. El nivel de preguerra se recuperará en 1923.
-
Los años veinte son de prosperidad creciente. Se partirá del mínimo de 1921 hasta el máximo de 1929 con un aumento total del 39 por 100. De 1929 a 1932 el PIB cae continuamente, totalizando una pérdida de algo más de 10 puntos porcentuales.
-
La recuperación se aprecia desde 1933 y durará hasta 1939, totalizando un 30 % de incremento. Las políticas económicas desplegadas no aspirarán a volver a la normalidad de preguerra, sino que serán cada vez más autárquicos y se orientarán a preparar nuevos conflictos bélicos.
-
El máximo de 1939 aguantará precariamente hasta 1943, para hundirse estrepitosamente en 1944 y 1945. La caída -del 15 %-, será la más fuerte del siglo. A medida que la segunda guerra mundial llevaba al agotamiento a los países beligerantes, y que la desorganización se multiplicaba, la capacidad productiva se paralizaba.
-
El año 1946 significará un inicio de recuperación, pero aún muy tímido. La reconstrucción propiamente dicha se producirá en los años que van de 1947 a 1950, cuando la tasa de crecimiento de la Europa occidental estuvo en el 7 % anual durante 4 años. Los procesos de reconstrucción no se produjeron simultáneamente, ni ocurrieron en todas partes. La recuperación del máximo de preguerra se alcanzó ya en 1949. Ese es el momento que señala el final del período de «entreguerras». Se suele seleccionar 1913 como el último año completo de normalidad, y su final se extiende hasta el momento que se recuperan los niveles de PIB de preguerra.
Año |
PIB (1950 = 100) |
Tasa de crecimiento |
Año |
PIB (1950 = 100) |
Tasa de crecimiento |
1913 |
60,4 |
– |
1956 |
135,3 |
4,5 |
1914 |
57,5 |
–4,8 |
1957 |
141,3 |
4,5 |
1915 |
59,0 |
2,5 |
1958 |
144,7 |
2,4 |
1916 |
61,3 |
3,9 |
1959 |
151,6 |
4,7 |
1917 |
59,2 |
–3,3 |
1960 |
161,4 |
6,4 |
1918 |
57,0 |
–3,8 |
1961 |
170,0 |
5,3 |
1919 |
54,4 |
–4,5 |
1962 |
178,2 |
4,8 |
1920 |
55,7 |
2,3 |
1963 |
186,4 |
4,6 |
1921 |
55,2 |
–0,9 |
1964 |
197,4 |
5,9 |
1922 |
59,9 |
8,5 |
1965 |
205,9 |
4,3 |
1923 |
60,1 |
0,4 |
1966 |
214,0 |
3,9 |
1924 |
64,6 |
7,4 |
1967 |
221,5 |
3,5 |
1925 |
67,9 |
5,1 |
1968 |
233,6 |
5,5 |
1926 |
67,8 |
–0,1 |
1969 |
247,4 |
5,9 |
1927 |
71,7 |
5,7 |
1970 |
258,6 |
4,5 |
1928 |
74,4 |
3,8 |
1971 |
267,2 |
3,4 |
1929 |
77,0 |
3,5 |
1972 |
279,1 |
4,4 |
1930 |
74,9 |
–2,6 |
1973 |
294,9 |
5,7 |
1931 |
71,0 |
–5,2 |
1974 |
301,1 |
2,1 |
1932 |
69,2 |
–2,6 |
1975 |
299,2 |
–0,6 |
1933 |
71,8 |
3,8 |
1976 |
311,9 |
4,2 |
1934 |
74,2 |
3,4 |
1977 |
320,6 |
2,8 |
1935 |
77,3 |
4,0 |
1978 |
329,8 |
2,9 |
1936 |
79,6 |
3,0 |
1979 |
341,4 |
3,5 |
1937 |
83,0 |
4,3 |
1980 |
346,8 |
1,6 |
1938 |
84,8 |
2,2 |
1981 |
347,4 |
0,2 |
1939 |
89,7 |
5,7 |
1982 |
350,3 |
0,8 |
1940 |
88,5 |
–1,3 |
1983 |
356,5 |
1,8 |
1941 |
88,8 |
0,4 |
1984 |
365,2 |
2,4 |
1942 |
88,3 |
–0,6 |
1985 |
374,2 |
2,5 |
1943 |
88,2 |
–0,2 |
1986 |
384,7 |
2,8 |
1944 |
84,1 |
–4,6 |
1987 |
395,7 |
2,9 |
1945 |
74,6 |
–11,2 |
1988 |
411,6 |
4,0 |
1946 |
76,3 |
2,2 |
1989 |
425,5 |
3,4 |
1947 |
81,1 |
6,3 |
1990 |
430,4 |
1,1 |
1948 |
86,4 |
6,6 |
1991 |
437,6 |
1,7 |
1949 |
93,0 |
7,7 |
1992 |
442,6 |
1,2 |
1950 |
100,0 |
7,5 |
1993 |
441,1 |
-0,3 |
1951 |
105,9 |
5,9 |
1994 |
453,4 |
2,8 |
1952 |
109,8 |
3,6 |
1995 |
464,2 |
2,4 |
1953 |
115,5 |
5,2 |
1996 |
471,8 |
1,6 |
1954 |
121,8 |
5,4 |
1997 |
483,8 |
2,5 |
1955 |
129,4 |
6,3 |
1998 |
496,6 |
2,7 |
El PIB de la Europa Occidental, 1913-1998.
Números índices (1950 = 100) y tasas de crecimiento interanuales (en porcentaje).
Evolución del PIB de la Europa Occidental 1913-1998 (1950 = 100).
Fluctuaciones anuales del PIB europeo occidental 1913-1998 (en %).
En cualquier caso, el PIB europeo occidental volvió a crecer con decisión desde la sima en la que había caído en 1945. Como una lectura atenta del cuadro permite detectar, el PIB no cesó de crecer desde 1946 hasta 1975. Se trata de la Edad Dorada de la economía capitalista. Estos años son los que separan el año inicial de Plan Marshall (1948) del último año de prosperidad confiada (1973):
-
A lo largo de los años de crecimiento ininterrumpido se pueden distinguir algunos períodos.
-
De 1946 a 1950, son los años de la reconstrucción rápida.
-
El crecimiento se desaceleró en 1951 y 1952, pero la guerra de Corea y la guerra fría volvieron a dar impulso y confianza a la economía europea occidental, de manera que el crecimiento recuperó fuerza hasta 1957.
-
En 1958, las economías europeas sufren una clara desaceleración de su crecimiento. La perplejidad dura poco, y ya en 1959 el crecimiento vuelve a sus niveles anteriores.
-
De 1960 a 1964, las tasas vuelven a niveles que parecían imposibles de repetir.
-
El milagro parecerá palidecer de 1965 a 1967, cuando el crecimiento se desacelere.
-
De 1968 en adelante comienza un nuevo ciclo expansivo que alcanzará los máximos de intensidad en 1969 y en 1973. Este será el último año de bonanza. La rápida subida del precio del petróleo pondrá un brusco punto y final a la edad dorada.
-
El año 1974 aún disfrutará de la inercia del pasado, pero la caída del PIB en 1975 reflejará poderosamente, por su excepcionalidad, el cambio de etapa que representó la crisis. Tras unos ajustes fuertes, las economías europeas occidentales recuperarán la senda del crecimiento durante cuatro años más, pero será a un ritmo menos intenso.
-
La segunda crisis del petróleo, más larga y no menos profunda, inaugurará una nueva etapa de pesimismo. Entre 1980 y 1981 las tasas de crecimiento se irán apagando. En 1982 apenas levantan cabeza. Los ritmos se recuperarán con gran lentitud, tendiendo a permanecer en la franja del 2 o 3 por 100, magnitudes que no sabían a verdadero crecimiento sino más bien a estancamiento. Este fue el término que acabó asignándose a todo el período que va de 1974 hasta finales de los ochenta.
- Cuando en 1988 la tasa de crecimiento alcanzó el 4 por 100 se pensó que la era del estancamiento había acabado. El hecho de que un nuevo período histórico, caracterizado por la caída del bloque soviético, dominara todo el panorama de la vida europea desde finales de 1989, ha alejado el término estancamiento de nuestro vocabulario.
Sorprendentemente, la disolución del bloque soviético no supuso una aceleración del crecimiento occidental. Entre 1990 y 1993 el PIB europeo occidental volvió a los niveles de semiparálisis que lo habían caracterizado entre 1980 y 1983. Más aún, 1993 volvió a ser el annus horribilis, sólo comparable a 1975, de la economía europea de posguerra. Tras las pérdidas de energía causadas por los conflictos entre políticas económicas, la mayor coincidencia posterior a 1993 ha producido unos años de crecimiento modesto pero bastante constante, que han seguido hasta el año 2000.